Qué ver en París en 4 días

Unas vacaciones de 4 días en París te permitirán conocer la ciudad con más profundidad y quizás dedicar un día a descubrir el Palacio de Versalles o si estás en París con niños, pasar un día en Disneyland París.

• Día 1: Ile de la Cité, Notre Dame, Sainte Chapelle, Conciergerie, Ile St. Louis, Le Marais, Place des Vosges, Museo Picasso.
• Día 2: Museo del Louvre, Jardines des Tuileries, Place de la Concorde, Champs-Elysées, Arc de Triomphe
• Día 3: Musée d’Orsay, Invalides, Torre Eiffel, Trocadero, Crucero por el Sena
• Día 4: Montmartre, Basílica del Sacre Coeur, Museo de Montmartre, Pigalle, Moulin Rouge

Lo que necesitas para un viaje de 4 días a París

En base al itinerario que propongo, es conveniente comprar el Paris Museum Pass que te hará ahorrar 32€ sobre los precios actuales.

El Paris Museum Pass es conveniente si decides visitar los siguientes museos y atracciones que te sugiero:

1. Sainte Chapelle y Conciergerie, 2. Museo Picasso, 3. Museo del Louvre, 5. Arc de Triomphe 6. Museo de Orsay, 7. Museo Armée con la tumba de Napoleón, 8. Museo de la Orangerie.

El coste total de estas atracciones es de 112€. Si compras el Paris Museum Pass de 4 días, que cuesta 80€, te ahorrarás la friolera de 32€.

Compra el Paris Museum Pass

En cuanto al transporte, como puedes comprobar leyendo el itinerario, no será necesario comprar ningún abono de transporte público.

De hecho, en un día solo se pueden utilizar dos billetes de metro y todo lo demás se puede visitar caminando a pie.

Día 1 en París: Notre Dame, Sainte Chapelle, Conciergerie, Le Marais y Museo Picasso

Comienza el descubrimiento de la ciudad desde su centro icónico o el área de la Catedral de Notre Dame. Sé que actualmente no es posible visitarlo por dentro, pero en 2024 volverá a ser accesible por lo que podremos volver a visitar su cripta y apreciar en su totalidad su estilo gótico.

Aunque no puedas entrar, la zona sigue siendo un excelente punto de partida para visitar la ciudad.

Como se mencionó, está perfectamente ubicado en el centro de París.

Si no tienes un hotel en esta zona, es muy fácil llegar gracias a las numerosas estaciones de metro. p.ej. en la isla Ile de la Cité se encuentra la estación por donde pasa el metro 4.

Catedral de Notre Dame

Como bien sabes, en 2019 hubo un terrible incendio que destruyó parcialmente la hermosa catedral. Se espera que las renovaciones terminen en 2024, año en que París albergará los Juegos Olímpicos.

En la misma isla Ile de la Cité se guardan otros preciosos monumentos de París que merecen absolutamente ser visitados: la Sainte Chapelle y la Conciergerie.

Pero antes de comenzar la visita de estos dos monumentos, quiero que descubras una joya de París que quizás no conozcas.

La Torre del reloj

¡La Torre del Reloj se encuentra en el Boulevard du Palais y ha estado allí desde 1370! Evidentemente, ha sufrido muchas restauraciones, lo que le ha permitido seguir funcionando durante más de 600 años.

Desde la Tour de l’Horloge ahora dirígete a la Sainte Chapelle, a solo unos minutos de distancia.

Sainte Chapelle (Santa Capilla)

Esta foto por sí sola debería ser suficiente para explicar por qué merece la pena visitar la Sainte Chapelle. Es una joya gótica también conocida como la Capilla Real.

Es una iglesia del siglo XIII donde será fácil perderse en la belleza de sus vidrieras.

La Sainte Chapelle, al igual que la Conciergerie, forma parte del Palais de la Cité, que ha sido la sede del poder francés desde el siglo VI.

Siempre hay muchas colas para visitar esta atracción imperdible, por lo que te sugiero que compres tu entrada con anticipación.

Conciergerie

La Conciergerie es la parte más antigua de todo el Palais de la Cité. Fue la residencia de los reyes de Francia hasta alrededor de 1400 cuando se trasladaron a su nueva residencia donde ahora se encuentra el Museo del Louvre. Durante la Revolución Francesa fue utilizado como prisión.

El edificio es de estilo gótico como otros monumentos de esta isla y aunque hay mucho que ver en París, en mi opinión no deberías perderte una visita a esta joya de París.

Aquí también siempre hay una larga cola y te aconsejo que compres las entradas con antelación.

Si visitas tanto la Sainte Chapelle como la Conciergerie puedes ahorrar varios euros comprando un billete unico.

Como he escrito varias veces, la zona es muy céntrica y, de hecho, en las cercanías tendrás muchas opciones para elegir qué ver después de salir de la isla.

Una de las atracciones más cercanas es, p. el museo del Louvre, pero creo que el día se vuelve demasiado pesado estando siempre encerrado.

Ile de la Cité también está muy cerca del Centro Pompidou, pero incluso en este caso sería un museo más, por lo que mi consejo es pasar un tiempo al aire libre y visitar el hermoso distrito de Le Marais.

Para llegar te sugiero que tomes esta ruta: cruza toda la Ile de la Cité hasta la zona de Notre Dame y toma el Pont Saint-Louis que conecta esta isla con la Ile St.Louis.

Ile St. Louis también merece una breve visita y quizás si ya es la hora del almuerzo hay algunos excelentes restaurantes donde puedes parar. En la guía sobre esta zona encontrarás más información.

Tras la visita y el almuerzo en la isla, se toma otro puente para volver a tierra firme y se llega a la margen derecha (la margen derecha). El más bonito es el Pont Marie que se encuentra en el centro de la isla.

Desde el puente, hay 10 minutos a pie hasta el centro del hermoso distrito de Le Marais, Place des Vosges.

Plaza de los Vosgos

La Place des Vosges es una de las 5 plazas reales de París, es decir, las plazas construidas para albergar las estatuas de los soberanos donde la gente podía (y aún puede) pasear para admirarlas.

Cuando se construyó en el siglo XVII (XVII) de hecho se llamaba Place Royal, aunque el rey nunca había vivido en esta zona, donde residía la clase media alta de la ciudad.

Uno de los aspectos especiales son sus soportales que rodean toda la plaza y que la hacen perfecta para ser visitada incluso en un día lluvioso.

Además de relajarse, en esta plaza se puede visitar la casa de Víctor Hugo, que vivió aquí y que ha sido transformada en un museo dedicado al escritor francés.

Después de la visita a la plaza, descubre este hermoso barrio.

El Marais

El barrio de Marais en París es sin duda uno de los más bonitos para visitar. Esta área tiene la comunidad judía más grande de la ciudad y también es el centro de la comunidad LGBTQ.

Si quieres saber más sobre la historia de la ciudad está el Museo Carnavalet dedicado precisamente a la historia de París. La entrada es gratuita, por lo que puede ser una buena idea visitarla, solo recuerda que los lunes está cerrado.

No muy lejos del Museo Carnavalet se encuentra la Rue des Rosiers, la zona donde encontrarás más vestigios de la comunidad judía y por tanto también perfecta para comer quizás un excelente falafel. Si por el contrario quieres saber más sobre la cultura judía en el Marais hay varios museos dedicados al tema.

Está el Museo de Arte e Historia del Judaísmo, también cerrado los lunes y el Memorial del Holocausto (cerrado los sábados) cerca del Pont Marie de donde vienes.

Pero lo que te aconsejo no perderte por la zona es el Museo Picasso.

Museo Picasso

El Museo Picasso de París se encuentra en el Hôtel Sale 5, rue de Thorigny. Cerrado también los lunes, alberga una de las mayores colecciones del pintor español, dado que había vivido la mayor parte de su vida en París.

Podrás ver más de 300 cuadros (incluido el autorretrato, «La flauta de Pan» y «La Celestina») que van desde la primera época, la Azul, hasta las últimas producciones; una rica colección de dibujos preparatorios para la «Madamoiselle d’Avignon», numerosos testimonios del período cubista, así como una serie de pinturas inspiradas en las atrocidades de la guerra civil española.

Día 2 en París: Louvre, Place de la Concorde, Champs-Elysées y Arco del Triunfo

París es una de las capitales mundiales de la cultura, probablemente la más importante.

Por eso, el segundo día también comienza con una visita cultural, desde el museo más visitado del mundo, el Louvre.

Museo Louvre

Una visita al Museo del Louvre dura entre 2 y 3 horas de media, a menos que seas un súper amante del arte y entonces podrías quedarte allí todo el día.

Hablo de un museo inmenso: 160.000 m2, con 400 salas y más de 35.000 obras. Traducido en tiempo significa que si quisieras visitarlo todo tendrías que pasar varios días allí.

Pero como se mencionó antes, una visita promedio puede durar fácilmente una mañana. Te daré algunos consejos sobre las principales obras y su ubicación.

El Louvre está dividido en 3 alas principales: Richelieu, Denon y Sully.

En el área de Denon

En la zona de Denon se encuentran las obras más famosas e importantes.

En la planta baja se encuentran La Vénus de Milo en la habitación 345 y «Cupido y Psique semi-recostada» de Antonio Canova en la habitación 403.

En el primer piso del área de Denond encontrará:

• La Mona Lisa de Leonardo Da Vinci sala 711
• siempre en la misma habitación, el 711 encontrarás Le mariage à Cana (las Bodas de Caná)
• La Liberté Guidant le Peuple (La libertad guiando al pueblo) de Delacroix en la sala 700
• También en la misma sala son imperdibles “Le radeau de la Méduse” (La balsa de la Medusa), “Officier de chasseurs à cheval de la Garde impériale, chargeant” (Oficial cazador a caballo de la Guardia Imperial, a cargo ) y la Mort de Sardanapal.
• En la sala contigua, la 702, hay 3 obras de especial importancia que no debe perderse: La Grande Odalisque, el cuadro «Coronación del emperador Napoleón I y coronación de la emperatriz Josefina en la catedral de Notre-Dame de París» y el “Juramento de los Horacios”.

Si eres un amante de la cultura del Antiguo Egipto entonces no puedes perderte la zona de Sully dedicada precisamente a las esculturas y la vida de esta fascinante civilización.

Después de la visita al Museo del Louvre, una de las opciones para almorzar es dentro del mismo complejo, donde se encuentra el centro comercial Carrousel del Louvre y una amplia zona con muchos restaurantes donde comer.

Jardín de las Tullerías

Después de una mañana en el Louvre, los Jardin des Tuileries son perfectos para relajarse un poco al aire libre si el tiempo lo permite.

La avenida central está flanqueada por amplios macizos de flores adornados con esculturas y grandes jarrones y finaliza con un gran estanque octogonal rodeado de estatuas entre las que también destaca la representación del Tíber, el Nilo, el Sena, el Marne, el Loira y el Loiret.

Dentro del Jardin des Tuileries también se encuentra el Museo de l’Orangerie, una galería de arte impresionista y postimpresionista con obras principalmente de Monet.

Cruzando los jardines llegarás a la Place de la Concorde.

Place de la Concorde

La Place de la Concorde es principalmente famosa porque marca el comienzo de los Campos Elíseos, pero esta plaza y su Obelisco de Luxor, una obra milenaria de Egipto, también merecen una breve visita.

Es la plaza más grande de París y durante la Revolución Francesa fue la plaza de la guillotina donde también fue ejecutada María Antonieta.

Cruzando la Place de la Concorde verás el comienzo de las avenidas más famosas del mundo, los Campos Elíseos.

Campos Elíseos

En la zona inicial de los Campos Elíseos durante el periodo navideño encontrarás el mercado navideño. En la parte donde se encuentran los jardines de los Campos Elíseos también se encuentra el Palacio del Elíseo, residencia del presidente francés.

En el otro lado, sin embargo, encontrarás el Grand Palais (actualmente cerrado por renovación, debería reabrir en 2024) y el Petit Palais, el Museo de Bellas Artes donde te sugiero que hagas una visita y tal vez una parada.

La entrada es gratuita y también hay una cafetería en el interior.

Volviendo a los bulevares, podrás admirar las numerosas tiendas que bordean los Campos Elíseos, incluidas muchas boutiques de lujo.

También hay muchos restaurantes donde comer, algunas trampas para turistas pero también restaurantes con estrellas.

Al final de los Campos Elíseos encontrarás el Arco del Triunfo, uno de los símbolos de París.

Arco del Triunfo

Deja para el final la visita al Arco del Triunfo, así que dependiendo de la temporada en la que estés en París puedes ir al atardecer y disfrutar de una vista sublime.

Hay una tarifa de entrada y debajo encontrará el enlace para comprar boletos por adelantado, para ahorrar dinero y evitar las filas.

El Arco de Triunfo de París es el más grande del mundo y como todos los demás arcos triunfales del mundo, tomó como modelo el Arco de Constantino en Roma.

El Arco fue inaugurado el 29 de julio de 1836.

Día 3 en París: Museo de Orsay, Los Inválidos, Torre Eiffel, Trocadero y Crucero por el Sena

En los dos primeros días en París ya has visitado muchas cosas y muchos monumentos importantes y emblemáticos de la capital francesa, pero hoy irás a ver el mismísimo símbolo de París: la Torre Eiffel.

Pero seguro que ya has visto su silueta muchas veces durante los paseos realizados, pero hoy por fin ha llegado el momento de subir.

Pero antes de la Torre Eiffel hay otras cosas que no te puedes perder.

Si los dos primeros días los hemos dedicado casi por completo a la Rive Droite de París, la orilla derecha, hoy te trasladarás casi por completo a la Rive Gauche, la orilla izquierda.

El primero de todos es el Museo de Orsay, uno de los más bonitos e importantes junto con el Louvre que ya viste ayer.

Museo de Orsay

El Museo de Orsay es conocido en todo el mundo por albergar la colección más hermosa dedicada al impresionismo. Algunos pintores expuestos en el Museo de Orsay son, p. Van Gogh, Monet, Cézanne y muchos más.

Para llegar puedes tomar el metro 12 hasta Solferino o el RER C hasta la estación Museo d’Orsay.

Además de la belleza de las obras, también merece la pena una visita por la espléndida ubicación en la que se encuentra el museo. De hecho se encuentra dentro de la antigua Gare d’Orsay, una estación construida para la exposición universal de 1900 y convertida en museo entre los años 70 y 80.

Como se mencionó, es el museo más importante del mundo dedicado al impresionismo. De hecho, aquí están todas las obras más importantes de esta corriente artística, con 24 obras de Van Gogh, entre ellas el famoso autorretrato y «La noche estrellada sobre el Ródano».

El Museo de Orsay cierra los lunes, por lo que estas visitas se pueden realizar cualquier otro día de la semana.

Después de la visita al museo, ya debería ser hora de almorzar. Dentro del museo también hay un restaurante que ofrece cocina francesa. Tiene un ambiente refinado pero no excesivamente caro. Podrás comer gastando una media de 35€ por persona. Te dejo aquí la web oficial con el menú.

Tras la visita y el almuerzo en el Musée d’Orsay, es hora de poner rumbo al siguiente destino: Les Invalides para visitar el Museo de l’Armée y la Tumba de Napoleón.

Se trata de una caminata de 20 minutos que te ayudará a digerir tu almuerzo.

Les Invalides, el Museo Armée y la Tumba de Napoleón

Con la entrada para Les Invalides puedes visitar muchas cosas como la colección permanente del Museo de l’Armée y la Tumba de Napoleón I entre las principales.

El Museo de l’Armée es el museo militar más grande del mundo, con más de 500.000 objetos expuestos.

Pero sin duda el principal atractivo del complejo y el que atrae a la gente es la visita a la Tumba de Napoleón I.

La tumba se encuentra en la Eglise du Dome, la Iglesia Catedral. Además de la tumba de Napoleón, hay un mausoleo con otras tumbas, incluida la de Napoleón II.

Torre Eiffel

Una caminata de 20 minutos separa Les Invalides de la Torre Eiffel.

Te recomiendo que llegues dando un paseo por los Campos de Marte, los hermosos jardines verdes que ofrecen una espléndida vista de la Torre.

También parece trivial hablar de la Torre Eiffel, uno de los monumentos más famosos y reconocidos del mundo, así que te daré algunos datos y algunas informaciones prácticas para visitarla.

Hay 3 niveles que puedes visitar:

• el primero tiene 57 metros de altura
• el segundo a 116 metros
• el tercero a 276 metros!

Para cada nivel hay entradas diferentes, por lo que es mejor decidir con antelación hasta dónde quieres llegar para tener las entradas en el bolsillo y no hacer cola una vez allí.

A los dos primeros pisos también se puede llegar a pie subiendo los escalones y los billetes son más baratos que con el ascensor. En cambio, para llegar al último nivel solo queda el ascensor.

Además, si tu presupuesto lo permite, también es posible cenar en la Torre Eiffel en uno de los restaurantes presentes.

Crucero por el Sena

Poder admirar París incluso desde su río es una de las cosas que no te puedes perder en un viaje de 4 días a París.

Especialmente el crucero que sugiero que incluye un paseo de una hora por el Sena y luego una cena en un restaurante junto al río que ofrece una hermosa vista de la Torre Eiffel iluminada será una experiencia inolvidable.

Trocadero

Dada la hora, la única buena razón para ir al Trocadero es admirar la espléndida vista y tomar muchas fotos hermosas con la Torre Eiffel iluminada.

El Trocadero alberga museos, un acuario y hermosos jardines con la Fuente de Varsovia.

Día 4 en París: Montmartre, Basilica del Sagrado Corazon, Pigalle y Moulin Rouge

Desafortunadamente, el último día de vacaciones en París ha llegado y aún quedan cosas muy importantes por ver.

Normalmente dejo al final la parte que más me gusta, así queda en boca el sabor de lo mejor.

En este caso, el sabor que te quedará en la boca será el ambiente mágico de las calles de Montmartre, los artistas de la Place du Tertre, la Basílica del Sagrado Corazón… en fin, ¡vámonos que el día está rico!

Montmartre

No sé si tú también eres fan de la película «Amelie«. Sí, personalmente soy un soñador, aunque como dice la película “son tiempos difíciles para los soñadores”.

Entonces caminar por las calles de este barrio me hace soñar, me hace imaginar que estoy dentro de la película. Pero aunque nunca hayas visto la película o quizás no te haya gustado, seguro que estarás de acuerdo conmigo en que el barrio de Montmartre es mágico.

Si has elegido alojarte en Montmartre, no necesitas indicaciones sobre cómo llegar a esta zona. Si por el contrario tenías hoteles en otras zonas, te sugiero que llegues a Montmartre cogiendo el metro 12 y bajándote en la estación de Abbesses.

Esta estación se encuentra en la parte baja de Montmartre, bajando la colina. Para llegar a la cima se puede tomar el funicular.

¿Echará de menos una atracción dedicada a los enamorados en la ciudad del amor? Obviamente no.

Muros del «Te Amo»

En el barrio, a mi parecer, más romántico, muy cerca de la estación está el «Muro de los Te Amo» o en francés «Le Mur des Je t’aime».

Encontrarás las palabras «Te amo» en más de 250 idiomas en un área de 42 metros cuadrados.

Precisamente se encuentra en Square Jehan Rictus en Place des Abbesses.

El próximo destino es la Place du Tertre.

Place du Tertre

La Place du Tertre se encuentra a solo 5 minutos de la Place des Abbesses.

Es uno de los lugares más importantes y famosos del distrito de Montmartre. La Place du Tertre es principalmente famosa por sus numerosos artistas callejeros, 149, cada uno con su propio metro cuadrado para expresar todo su talento.

Seguramente uno de los recuerdos más originales de París es hacerse un retrato en esta plaza y colgarlo en casa para recordar siempre el ambiente bohemio de esta parte de París.

A pocos pasos de la Place du Tertre se encuentra el funicular de Montmartre, si no tiene ganas de subir los escalones hasta la basílica del Sacré-Coeur.

El funicular cuesta tanto como un viaje en metro o autobús y se puede pagar con cualquier billete o abono.

Basílica del Sagrado Corazón

Es sin duda uno de los monumentos más famosos de París y tras el cierre de Notre Dame es también el monumento religioso más visitado de la ciudad.

La Basílica del Sagrado Corazón se encuentra en lo alto de la colina de Montmartre desde donde se puede disfrutar de una vista fantástica de todo París.

La entrada a la basílica es obviamente gratuita y está abierta todos los días.

Puedes subir a la Cúpula para disfrutar de una vista aún más espectacular, ya que es uno de los puntos panorámicos más altos de todo París, solo superado por la Torre Eiffel.

La Basílica del Sagrado Corazón está abierta todos los días, al igual que la Cúpula y la cripta.

Para subir a la cúpula tendrás que afrontar 300 escalones, para alcanzar una altura de 83 metros y lamentablemente no hay ascensor.

Dentro de la Basílica notarás el enorme mosaico de 475 metros cuadrados que decora la Iglesia y representa el renacimiento de Cristo.

Incluso en la parte externa, en la fachada hay una hermosa estatua de Cristo con la mano en el corazón. De hecho, su nombre, Sagrado Corazón, representa el corazón mismo de Jesús.

Museo de Montmartre

A solo 200 metros del Sagrado Corazón se encuentra el hermoso museo de Montmartre, una atracción quizás poco conocida escondida entre las otras atracciones de Montmartre.

En el interior encontrarás la recreación del estudio de Suzanne Valdon, con artículos que le pertenecen. Quizás el nombre no te diga nada, pero fue modelo de Toulouse-Lautrec y madre del pintor Maurice Utrillo.

Pero lo más interesante es la recreación del estudio de Renoir.

Tampoco te puedes perder los hermosos Jardines de Renoir.

Para el almuerzo en las inmediaciones del Museo de Montmartre está la Maison Rose.

La Maison Rose está ubicada en 2 Rue de l’Abreuvoir y su menú se basa en la cocina vegetal francesa y la cocina italiana pobre y siempre ofrece ingredientes de temporada.

Si vas con buen tiempo, puedes aprovechar la hermosa terraza con vistas a Montmartre.

Para obtener más información sobre el menú, visita el sitio web oficial.

A pocos pasos de la Maison Rose se encuentra el viñedo de Montmartre, el último viñedo que queda en París. Normalmente no se puede visitar a menos que estés en París durante el Festival de la Vendimia.

Ahora toca visitar la parte baja de Montmartre. Dirígete a Rue Lepic, una de las calles más emblemáticas de Montmartre.

En esta calle se encuentra el café donde trabajaba Amelie, el Café des 2 Moulins.

Sigue bajando por la Rue Lepic y te encontrarás con el Moulin Rouge en tu camino.

Moulin Rouge

El mundialmente famoso Moulin Rouge se encuentra entre los distritos de Montmartre y Pigalle.

Si tienes la oportunidad económica de asistir a un espectáculo, es una de esas actividades únicas que solo se pueden realizar en París.

Los costos son de € 119 y es posible ver el espectáculo y también cenar para completar tu viaje de 4 días a París.